Ya se acerca el 23 junio y la festividad de San Juan, una fiesta repleta de diversión, de hogueras y petardos. Pero como toda fiesta, tiene sus riesgos, y eso comporta que cada año muchas personas recurran a los servicios de urgencias por afectación de quemaduras debido al contacto del fuego con la piel.

Las quemaduras se clasifican en diferentes grados:

  • La quemadura de primer grado o leve es cuando se encuentra solo en la capa superior de la piel y suele hincharse y volverse rojiza.
  • La quemadura de segundo grado es cuando está en una capa más profunda de piel, y puede presentar, además de los síntomas anteriores, ampollas.
  • Los siguientes grados ya son quemaduras graves y se debe recurrir al hospital.

Cuando son quemaduras leves el tratamiento recomendado es el siguiente:

  • Es necesario que la persona afectada esté calmada.
  • Si hay tejidos cercanos a la quemadura que no estén pegados, se deben despejar.
  • Se debe limpiar la piel usando agua fría. No usar hielo ni sustancias grasas.
  • Si hay ampollas, no se deben romper ya que se pueden infectar.
  • Evitar roces con la quemadura. No utilizar apósitos que dejen fibras.
  • A medida que se va curando puede producir picor. Evitar rascarse.

Si una vez realizada la primera cura se observa que la quemadura es profunda o más grande de lo normal, o está en zonas como manos, pies, la cara, ingle o glúteos, cadera o el tobillo, recurra a atención médica. Si la herida empeora, pida atención médica ya que puede haberse infectado y necesite tratamiento médico.

En caso de duda, recurra a un equipo médico.